¿Qué tan dispuestos podemos estar al cambio?
En nuestra vida personal, laboral, académica. En lo laboral, ya sabes en qué momento entrar a la oficina para llevarle el cafecito a tu jefe; académico, el cambio repentino de tu profesor favorito; en lo personal, tienes que mudarte de una casa a un departamento, cómo manejarías cada situación, qué tan dispuesto estás dejar tu sitio de confort, qué tan bueno o malo puede ser, cómo reaccionarías a tales situaciones, ¿lucharías por mantenerte donde estas o lo aceptarías?.
Hemos escuchado la resistencia de personas en varias áreas de sus vidas, a nadie le gusta los cambios repentinos, ya sean anunciados o con anticipación, cual sea el caso casi siempre hay rechazo al cambio.
Hemos escuchado la resistencia de personas en varias áreas de sus vidas, a nadie le gusta los cambios repentinos, ya sean anunciados o con anticipación, cual sea el caso casi siempre hay rechazo al cambio.
Les vamos a contar una historia en el área laboral, donde Sonia no aceptaba el cambio, bastó una conversación para saber toda la verdad, sigue leyendo para saber que pasó:
Sonia trabajaba en una empresa muy reconocida, ella tenía 8 años laborando, era la asistente del Sub-Gerente General, todos se llevaban de maravilla, había compañerismo, respeto, se valoraba al personal, pero de repente al jefe le da un paro cardiaco y la empresa, decide poner a cargo al Ing. Camacho.
Sonia trabajaba en una empresa muy reconocida, ella tenía 8 años laborando, era la asistente del Sub-Gerente General, todos se llevaban de maravilla, había compañerismo, respeto, se valoraba al personal, pero de repente al jefe le da un paro cardiaco y la empresa, decide poner a cargo al Ing. Camacho.
Lo
conocían por tener un carácter grotesco. Cuando se dió a conocer la
noticia de quién asumiría el puesto, entraron en temor los empleados ya que en
cada reunión el comentario de tal ingeniero era: "hay que reducir personal y
contratar a gente joven para que esto corra con mayor rapidez". Casi todos tenían muchos años en la empresa, sobre todo Sonia que
era la más antigua, por eso ella entra en temor, tomando una decisión
apresurada.
Ella presentó su carta de renuncia para salir con dignidad, decía Sonia. Al enterarse su nuevo jefe, la llama a su oficina pidiendo que por favor le dé una explicación, ella fue clara en decirle las cosas como son, de lo que siempre le escuchaba decir en las reuniones. Él la miró, sonrió y le dijo:
"No temas Sonia, sé que tú eres una excelente asistente, no todos trabajan
como tú lo haces, habrán cambios para mejorar, ya que no
todos cumplen sus labores como tú lo haces, pero yo valoro la manera
en que te desempeñas, sugiriendo un aumento de sueldo, teniendo como respuesta
un no, así que eso es lo que haré Sonia, por tu buen desempeño, la empresa te
necesita para que apoyes en los cambios que se harán".
“No temas Sonia,
sé que tú eres una excelente asistente, no todos trabajan como tú lo haces, de
haber cambios habrán, pero para mejorar, ya que no todos cumplen sus labores
como tú lo haces, y valoro la manera en
que te desempeñas, por eso tendrás un aumento de sueldo Sonia, esto es por
tu buen desempeño, la empresa te
necesita para que apoyes en los cambios que se harán”
Sigue adelante, adáptate al cambio, no siempre es malo hacerlo.
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